Tenemos una preferencia particular por ciertas canciones ya sea por su ritmo que nos contagia de alegría y nos enchufa en la diversión, porque aprendimos a quererla por alguna otra persona; pero tal vez nos gusten algunas canciones porque sus letras cuentan, como nosotros quisiéramos contar, alguna etapa de nuestra vida en algo así como 4 minutos. Creo que también algunas canciones son especiales para nosotros y hasta nos llegan a gustar, porque gracias a ellas recordamos a una persona que fue importante, especial y que marco de alguna forma nuestra vida y nos remonta a algún lejano o cercano pasado con tristezas o alegrías. Son gracias y por culpa de esos juegos de la mente, que al escuchar una canción que está grabada en nuestra mente, automáticamente nos conectamos con los recuerdos de esa persona, y recordamos algún lugar, una experiencia, y por unos instantes mágicos o infernales quedamos atrapados en el recuerdo mientras escuchamos esa canción. Y es que las canciones son como fotografías mentales. Las imágenes buenas o de las otras, las pone nuestros recuerdos en relación directa a las buenas o malas experiencias que evocamos al escuchar nuestras favoritas, o aquellas que no siendo nuestras favoritas la radio las toco y nos enchufo con los recuerdos. No podemos hacer nada, esa canción nos traerá algún recuerdo, y ojala siempre fueran solamente buenos recuerdos, pero no siempre es así.
Como las canciones, los poemas grafican momentos o etapas que hemos vivido, ellos dicen lo que algunos quisiéramos decir, pero de una forma más edulcorada y decente.
De todos los poemas que he leído en Sour de Media Noche, hay uno al que le guardo un particular cariñó, muy a pesar mío, cuenta lo que en algún momento lo que tal vez quisiéramos decirle a alguien. Me permito compartirlo en el Blog, lo leí el pasado domingo en el programa, porque me lo pidieron, pero además, aunque suene a conchudez, me lo pedí a mí mismo. De tanto leerlo casi me lo aprendí de memoria, lo leo en silencio y siento que debería dedicárselo a alguien, pero sé que eso resulta prohibido, pero que importa, se que mucho de lo que está prohibido para mí me hace vivir, y entonces en silencio me permito dedicárselo. Tal vez esa persona lea estas líneas, y se preguntara… ¿Qué mujer será esa? Y no comprenderá.
Paúl
YO SEGUIRE SOÑANDO
Yo seguiré soñando mientras pasa la vida,
y tú te irás borrando lentamente en mi sueño.
Un año y otro año caerán como hojas secas
de las ramas del árbol milenario del tiempo,
y tu sonrisa, llena de claridad de aurora,
se alejará en la sombra creciente del recuerdo.
Yo seguiré soñando mientras pasa la vida,
y quizás, poco a poco, dejaré de hacer versos,
bajo el vulgar agobio de la rutina diaria,
de las desilusiones y los aburrimientos.
Tú, que nunca soñaste más que cosas posibles,
dejarás, poco a poco, de mirarte al espejo.
Acaso nos veremos un día, casualmente,
al cruzar una calle, y nos saludaremos.
Yo pensaré quizás: «Qué linda es, todavía».
Tú, quizás pensarás: «Se está poniendo viejo».
Tú irás sola, o con otro. Yo iré solo, o con otra.
O tú irás con un hijo que debiera ser nuestro.
Y seguirá muriendo la vida, año tras año,
igual que un río oscuro que corre hacia el silencio.
Un amigo, algún día, me dirá que te ha visto,
o una canción de entonces me traerá tu recuerdo.
Y en estas noches tristes de quietud y de estrellas,
pensaré en ti un instante, pero cada vez menos.
Y pasará la vida. Yo seguiré soñando,
pero ya no habrá un nombre de mujer en mi sueño.
Yo ya te habré olvidado definitivamente,
y sobre mis rodillas retozarán mis nietos.
Y quizás, para entonces, al cruzar una calle,
nos vimos frente a frente, ya sin reconocernos.
Y una tarde de sol me cubrirán de tierra,
las manos, para siempre, cruzadas sobre el pecho.
Tú, con los ojos tristes y los cabellos blancos,
te pasarás las horas bostezando y tejiendo.
Y cada primavera renacerán las rosas,
aunque ya tú estés vieja, y aunque yo me haya muerto.
José Ángel Buesa
5 comentarios:
Me mataste con lo q escribiste, pero no te noto tan tierno y melancolico en tu programa o son melancolias guardadadas que las pones recien. Aceptame para hablar kat_nice_girl@hot
tu siempre oyente
ML
buena soñador es una tierna historia de amor, y que mujer sera esa? ¿sere acaso yo? jajaja
sigue soñando que te eseguire escribiendo
ana lucia jb
No t pongas picon polcito lindo, te queremos solo q entenderas q un chico romantico e inpsirado no es algo muy comun en estos dias. se ve q tienes tu lado tierno auqnue me gusta verte o escucharte picaro como eres. <No te mueras nunca y sigue escribiendo, no les hagas caso a las piconas, a ellas nunca les dedicaras nada, a mi si... ¿no?
tu amante fiel y eterna admiradora.
Clau
pd. revisa el correo, tienes un regalo mio, creo que ya viene tu cumple??
No hace falta ser romántico para apreciar un poema, hace falta talvez haber conocido el amor, es cierto, hay personas que dejan una huella en nuestra vida que serán inolvidables y a pesar de seguir con el rumbo que la vida o nuestras decisiones nos marcan vivirán en nuestra alma y será inevitable que aparezcan en nuestra mente al pasar por una calle, escuchar como dices una canción o simplemente recordar su perfume.
El que nunca ha amado no entenderá de que se habla pero los que hemos tenido la dicha de amar seguro seguiremos disfrutando te tu talento literario.
Gatita
El que se pica pierden tienes bien sentido del humor eso parece en la radio, asi que deberás soportarnos, aguante!
Coincido contigo en que las canciones nos recuerdas a personas, yo tengo muchos recuerdos con algunas personas y suelo escuchar esa musica justamente para recordarlos. Soy medio masoquista, que digan eso pero nadie me quitara los recuerdos.
ahora estoy casada, no tan feliz pero me defiendo, los recuerdos me ayudan a saber que alguna vez me quisieron mucho u quise mucho.
Chau Paul, bonito articulo
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